La concejala adscrita a la delegación de Playas, Susana Aragón, ha informado de que los usuarios dispondrán de este servicio en las playas de La Rada (módulo de Monterroso) y El Cristo. En ambos enclaves se contará con técnicos sociosanitarios y material adaptado, que incluye sillas anfibias, tumbonas adaptadas, andadores para la arena y juegos de muletas anfibias.
Este servicio será prestado por la empresa concesionaria que se encarga del salvamento y socorrismo en playas y la piscina municipal de Santo Tomás de Aquino, según ha indicado la concejala, quien ha añadido que este servicio se suma a otras actuaciones efectuadas para hacer que las playas sean accesibles para todos.
Así, ha señalado que el Consistorio ha instalado pasarelas con un ancho especial en los accesos públicos a las playas, lo que permite el tránsito de sillas de ruedas. Además, se han dispuesto áreas de sombra destinadas a las personas que tienen dificultades de movilidad.
Aragón ha explicado que para el Ayuntamiento de Estepona es «una prioridad que el litoral sea un espacio accesible y cómodo para que cualquier persona pueda disfrutar de un baño durante la temporada estival». Además, a través de estas iniciativas, ha añadido, dan respuesta a demandas de usuarios con problemas de movilidad «y contribuimos a que Estepona sea una ciudad accesible, inclusiva y con mayor calidad de vida».
Con respecto a las áreas de sombra, la edil ha precisado que se trata de seis estructuras, que el pasado verano fueron renovadas por el Ayuntamiento y cuentan con mayor amplitud y una mejor calidad de materiales. Están repartidas por las principales playas, así una de ellas se ubica en El Cristo, otra en El Padrón y por último cuatro de estos equipamientos se sitúan en la playa de La Rada, dispuestos en las zonas de La Cala, frente al restaurante ‘El Pescador’, zona Monterroso y frente a la barriada de Pescadores.
Aragón ha precisado que desde 2012 uno de los objetivos del equipo de gobierno ha sido ejecutar una política enfocada, en todas las áreas de gestión, a mejorar la calidad de vida de todos los ciudadanos, con especial atención a infraestructuras y servicios; así como a políticas de gestión social que favorezcan la integración de colectivos vulnerables y personas con discapacidad.